La Voz de Galicia
La nueva unidad de diálisis del Lucus Augusti mejorará la calidad de vida de los 30 pacientes que acuden a recibir el tratamiento en días alternos. Los 17 monitores de hemodiálisis de los que dispone son de última generación; y, según el coordinador de la unidad, Gerardo García Trío, el uso de estas nuevas tecnologías se refleja en una mejora de los resultados de las analíticas y, por lo tanto, en el estado general del enfermo. También se benefician los pacientes crónicos y los aislados de unas instalaciones más espaciosas y modernas.
Técnicamente la unidad está capacitada para atender a 88 pacientes crónicos a la semana -en dos turnos-, a los agudos -cuyo número es variable- y a los que estén ingresados en unidades especiales como reanimación, UCI o coronarias y a aquellos que necesitan estar aislados del resto. Sin embargo, el crecimiento está limitado a un posible incremento de personal, especialmente de enfermería, según reconoció Gerardo García.
«El cambio se ha notado -señaló el nefrólogo-. Multiplicamos el espacio, en el Xeral estabamos viviendo una situación de hacinamiento y era difícil hacer cosas con los criterios de calidad de ahora». «Tampoco disponíamos -añadió- de espacio para dializar a todos los enfermos crónicos, porque de lo contrario no podríamos atender a los agudos y un porcentaje importante tuvimos que derivarlo a centros concertados».
Limitaciones
El cooordinador de la unidad desconoce cuál será el crecimiento a partir de ahora, porque las posibilidades dependen de un incremento de personal, que es una decisión que toman a un nivel superior. «El que tenemos -señaló-nos limita crecer de forman indiscriminada y lo iremos haciendo a medida que dispongamos de más personal».
Además del Lucus Augusti suministran tratamientos a enfermos con insuficiencia renal el hospital de Burela y las clínicas de la multinacional Braun, de Lugo y de Monforte, que asumen unos 130 pacientes entre ambas. Cuando sufren algún problema agudo, complicación o cuando necesitan otro tipo de cuidados, los atienden en la unidad del hospital público.
Patología en aumento
Los pacientes con insuficiencia renal van en aumento. En Lugo supone el diagnóstico de unos 30 casos nuevos al año que necesitan dialisis en alguna de sus dos modalidades. La provincia sigue las mismas pautas que el resto del estado y la incidencia no es superior. En buena medida este incremento obedece a que en los últimos años los avances médicos han supuesto que se ampliara el abanico de pacientes susceptible de acudir a diálisis. «Ahora no es como hace unos años -señala-; no se ponen impedimentos por la edad ni por la patología. Las dializamos de todo tipo para mejorar la calidad de vida del paciente, incluso las tumorales. Tratamos las cardiacas, las hepáticas, y nuestros pacientes en un elevado porcentaje son diabéticos». García recuerda que la esperanza de todos es un trasplante.
Pacientes complejos
La mayoría de los pacientes que acuden a la unidad del Lucus Augusti han cumplido ya los 65 años. Según Gerardo García, los de menos de esa edad son minoría. En el hospital lucense no atienden a ningún niño. «Cada vez -reconoció-aumeta más el número y su complejidad».
