La Xunta ve demasiado bajas las tarifas del hospital bonaerense

EL PAIS

La decisión de disolver la Fundación Galicia Saúde que gestionaba hasta ahora el hospital del Centro Gallego de Buenos Aires ha hecho aflorar las diferencias entre los dirigentes de esta institución y la Secretaría de Emigración de la Xunta sobre el camino a seguir para afrontar el rescate financiero del centro sanitario, que acumula una deuda superior a los 20 millones de euros y sigue aumentando su déficit. La incertidumbre sobre el futuro del hospital preocupa a centenares de familias gallegas en Buenos Aires que son socios de la entidad desde hace décadas.

El presidente del Centro Gallego, Carlos Vello, considera que la disolución va a retrasar la solución a los problemas del hospital y asegura que la Xunta no tuvo en cuenta la propuesta alternativa presentada por él mismo la semana pasada en Santiago. Por su parte, el secretario de Emigración de la Xunta insiste en que la disolución era "la única opción posible" y asegura que el Gobierno gallego va a hacer frente a sus responsabilidades y va a vigilar que los ciudadanos gallegos que reciben atención sanitaria en el centro no sufran las consecuencias de la crisis financiera que atraviesa.
Camba explicó que el plan de viabilidad presentado por el propio Vello era "más de lo mismo" y no aportaba soluciones a la grave crisis que sufre el hospital. Además, puntualizó que la disolución de Galicia Saúde era imprescindible porque si no, se podía incurrir en responsabilidades penales y patrimoniales por el pasivo generado en los últimos años.
El secretario de Emigración de la Xunta reclamó un esfuerzo conjunto del Gobierno español, la Xunta y los directivos del centro para sacar adelante a la institución y apuntó que parte de los males vienen por la prestación de servicios en el hospital a un coste inferior al de mercado. "Desde la Xunta vamos a hacer lo posible por garantizar la asistencia sanitaria a los gallegos que se atienden en el hospital. Lo que sí pedimos es que no haya dobles discursos por parte de algunos y que todos trabajemos para solucionar los problemas lo antes posible", añadió.
Por su parte, Carlos Vello considera que la disolución de Galicia Saúde no es la mejor alternativa para solucionar los problemas del hospital y recordó que la Xunta tendrá que hacerse cargo de la mitad del pasivo existente para poder abandonar la gestión del hospital, que hasta ahora compartía con el Centro Gallego.
"Esperamos que la Xunta continúe apoyando financieramente pero en las últimas reuniones no se ha hablado de cifras concretas. El socio no está tranquilo ante esta situación y no se le está tratando como merece", indicó el presidente de la entidad. Según apuntó, el déficit está creciendo a un ritmo de 400.000 euros mensuales, lo que hará que el pasivo sigue aumentando hasta que consiga llegarse a una solución. Vello insiste en que la mejor alternativa es transferir la gestión del hospital a la directiva del Centro Gallego lo antes posible.