La falta de ayudas pone contra las cuerdas al Proxecto Home

La entidad busca la colaboración de empresas y particulares

La Voz de Galicia

Ayudar a quien más lo necesita se hace más cuesta arriba cuando toca apretarse el cinturón. Lo sabe bien el director de Proxecto Home Galicia, Ramón Gómez Crespo, que hace cuentas a la baja intentando, por todos los medios, que la atención que presta la institución no decaiga. Pero los números son tozudos: el recorte de gastos en la Administración ha traído consigo un reajuste de las subvenciones. ¿Y en qué se traduce eso para Proyecto Hombre? En un presupuesto un 35% más escaso.

Pero las adiciones van a su ritmo y no entienden de cálculos; en tiempos de crisis, hay más adictos y menos recursos para echarles una mano.

Ese 35% menos es mucho dinero, porque hay que sumarle lo que caen las aportaciones privadas: Este año, en total, unos 400.000 euros menos que el anterior para una institución que tiene un centenar de trabajadores, instalaciones y que se acaba de embarcar en la construcción de una gran sede en Santiago de Compostela. Tienen el respaldo de la Fundación Amancio Ortega, pero para la construcción poner a funcionar esta estructura multifuncional cuesta todavía más dinero. Incluye un área de terapia ambulatoria, zona residencial, administrativa, talleres, zonas deportivas y otros servicios.

En la última asamblea de Proyecto Hombre, celebrada en la capital de Galicia, Gómez Crespo habló claro: «A situación xeralizada de crise económica que está a afectar a todos os estamentos sociais por igual ten como consecuencia unha redución moi significativa dos ingresos que Proxecto Home está a recibir». Y señaló, sobre todo, a las administraciones públicas, donde mandan la contención y la austeridad. De la mano, bajan también las aportaciones de entidades privadas y particulares. Así que, para mantener en funcionamiento todos los programas y dispositivos que prestan atención, cada año, a más de 1.100 usuarios y a sus familias, hay que hacer lo imposible.

¿Qué se puede hacer ante este panorama? Trabajar en la concienciación y en la movilización social para buscar fondos que permitan seguir con el trabajo. Nace así la campaña Resposta Social Solidaria, que fija el objetivo en empresas y particulares que quieran colaborar con Proxecto Home Galicia; invertir en una actividad rehabilitadora «que se mide, día a día, en termos de integración persoal, familiar e social», explican.